El Granada C.F. consigue una nueva victoria en liga. Esta vez, venciendo con claridad merecimiento y algún que otro apuro a una U.D. Melilla que no demostró mucho con su juego. Se pudo ver un partido matinal muy intenso, con mucha concentración y seguridad atrás y chispa y descaro en el ataque.
El estado de la económica del club, la incertidumbre con respecto al cobro de las cantidades pactadas con los patrocinadores y la crisis generalizada por la que pasa el país, que tanto está afectando a la 2ª B, han generado una grave situación, de falta de pagos a la plantilla por más de 4 meses. Al saltar al campo, y siendo la primera medida de protesta en todo este tiempo, los jugadores llevaban una camiseta blanca con la que reclamaban los pagos al todavía presidente, y tras el pitido inicial se arrodillaron mirando al palco. Los jugadores melillenses, respetuosamente tocaron el balón en su campo mientras que el público aplaudió a sus futbolistas, solidarizándose con ellos en estos complicados momentos.
Una vez comenzó el encuentro, los rojiblancos se fueron haciendo con el control poco a poco, viéndose muy poco al meta José Antonio, y llegando constantemente a la portería defendida por Dorronmoro. Unos primeros acercamientos con peligro por parte de Jesús Sierra y Oscar Martínez fueron contestados por una buena jugada y un centro medido del ex-granadinista Zúñiga, sin consecuencias.
La firmeza en la zaga mostrada por Suárez, Lucena y Carlos R
uiz, hicieron cuestionar el potencial atacante de un equipo que pugna por los puestos de play-off, mientras la chispa y la entrega de nuestros jugadores de banda Vicentaco y Lafuente, pusieron en apuros a la defensa norteafricana, diezmada por la sanción de algunos titulares. Los nuestros se ofrecían, desbordaban, tiraban paredes y en ocasiones podía más la obcecación por anotar que el acierto del portero visitante.
De cualquier manera, en el 56 de la segunda parte, tras muy buenas jugadas de los locales, un mal despeje de puños fue aprovechado por Oscar Martínez para inaugurar el marcador. Si durante el partido se cuestionó la actuación arbitral, en algunas jugadas polémicas, y algunos penaltys dudosos, un minuto después del gol, se olvidaría prácticamente todo. Tras una caída en la zona de castigo, el árbitro sacó amarilla al delantero, para respiro de una grada que ya pensaba en lo peor.
En los últimos minutos, con un Melilla que buscaba el empate con nervio, pero sin más recursos que colgar balones al área, y un Granada que al contraataque consiguió multitud de oportunidades de sentenciar el encuentro, se vivió un momento de alivio y euforia con el pitido fin
al del árbitro. La piña de los jugadores, y el aplauso unánime de la grada respondido por estos, son signos más que evidentes de la inyección de moral que nos supone sumar de tres en tres.
El miercoles anterior teníamos asamblea de socios. Una de las más importantes, por los temas a tratar y las posibles conclusiones que podrían sacarse. Finalmente todo se atuvo a lo esperable. Se decretó día del club para los próximos partidos en casa y se aprobó el calendario electoral. El resto de lo que pasara también formaba parte de lo esperable dada la relevancia del momento y la tensión con la que vive el granadinismo.
La Asociación Granadinista ha abierto una cuenta con el nombre: "SALVEMOS AL GRANADA" y número: 3023 0163 49 5545828609 , destinada al pago de las nóminas pendientes con los jugadores. Todos podemos colaborar, demostrando a nuestros futbolistas que estamos con ellos, y a toda la ciudad que los socios no vamos a permanecer estáticos ante esta situación.
Los próximos partidos, ante Linares, Ceuta y una Copa Federación ante el Jaén irán definiendo si realmente el futbol hace justicia ante una plantilla y una afición que no merece estar pasando por estos duros momentos. Juntos podemos.
